LOS MARONITAS…LA IGLESIA DE SAN CHÁRBEL (SEGUNDA PARTE)

LOS MARONITAS Y ROMA

Si el mundo ignora las peleasde los maronitas contra los errores y si los discípulos de San Marón llegaran alguna vez a dudar de su identidad, o si los adversarios tratan de denigrar el papel importante que los maronitas juegan en la vida de la Iglesia, los Papas de Roma, sin embargo, han prestado con sus bondadosas palabras un testimonio importante que llena de orgullo a todos los discípulos de San Marón:

Así León X, escribía, en 1515, al Patriarca maronita : ” conviene que alabemos y bendigamos la divina clemencia, porque entre las naciones orientales infieles y en los campos del error, haya el Altísimo querido que sean los maronitas casi rosas entre espinos”. Clemente XII en 1735 , califica a la nación maronita de “Rosa entre las espinas, de roca solidísima contra la cual se rompen las furias de la infidelidad y de las herejías”. Y San Pío X, entre otras palabras, dice, hablando de los maronitas” Amamos a todos los cristianos del Oriente, pero los Maronitas ocupan un lugar especial en nuestro corazón porque han sido en todo tiempo la alegría de la Iglesia y el consuelo del Papado…, la fe católica está arraigada en el corazón de los Maronitas como los muy antiguos cedros están hincados por sus potentes raíces en las altas montañas de su patria”.

No es necesario hablar más sobre este sublime aprecio de los Papas a los Maronitas y es muy elocuente la actitud de los últimos Pontífices que convivieron con los recientes dramas que afectaron a los maronitas en la última guerra que castigó cruelmente durante 17 años al Líbano. Las palabras, los gestos, la preocupación casi diaria y la manifestación continua del afecto más puro y sincero del actual papa Juan Pablo II hacia el Líbano, han sido un bálsamo para el dolor del pueblo maronita y una fuerte dosis de esperanza para los creyentes de San Marón en su lucha por sobrevivir. Recientemente, a una Asamblea especial del Sínodo de los Obispos dedicado al Líbano, como también, la visita del Sumo Pontífice a la tierra de los fenicios, no fue sino una prueba a más del amor que tiene el Papa por los cristianos del Líbano y en particular por el destino de la Iglesia Maronita.

Pablo Meouchi, Pablo Agustin Meouchi, Pedro Pablo Meouchi, Pablo Agustin Meouchi Saade San Charbel, José Meouchi, Grupo Jezinne, Maronitas.

LOS MARONITAS Y EL LIBANO

Perseguidos a razón de su fe, los maronitas se escondieron en el Líbano, encontrando en él un lugar de libertad y con el espíritu tenaz cambiaron su árido suelo en un renaciente y fecundo vergel. Su historia se identificó con la historia del Líbano y no será extraño verlos defender su patria con valentía, sangre y heroísmo. Jamás el Líbano, único baluarte del cristianismo en oriente, se dejó avasallar por sus enemigos, gracias a la lucha de los maronitas y sus hermanos libaneses”Toda la Siria, escribía Jaled el conquistador árabe, cayó como un camello, el Líbano solo quedó erguido”. ¡Solo Dios sabe cuanta sangre vertió la nación maronita en esas luchas de exterminio que acompañaron su 13 siglos de caro fue el precio que pagó la nación maronita por causa de la ayuda que prestaron sus fuerzas a los cruzados, en su marcha al santo Sepulcro. Terminada la conquista europea, todo el odio de sus enemigos cayó sobre el Líbano, ensangrentando sus campos y arrasando su territorio. Esta historia dolorosa no se cerraba sino a cortes intervalos de tiempo, para volver a abrirse más triste y verter más sangre mártir. Tales fueron las matanzas feroces de los años 1834, 1845, 1860, 1914, 1920, 1925 y últimamente en la guerra de 17 años que comenzó el 13 de abril 1975.

No tiene caso continuar a deplorar los tristes y dramáticos episodios que ya son patrimonio de la historia; pero es necesario que los maronitas se sienten responsables de la vida o de la muerte del Líbano, único territorio donde se sienten dueños de su destino y donde radica la Iglesia madre que organiza su rito y que vela por la integridad de su fe y la sanidad de sus tradiciones. Como es Roma para los católicos, Armenia para el pueblo armenio, Palestina para los palestinos e Israel para el pueblo judío, así es de importante Líbano para los maronitas. Sin una tierra no se puedeganar una existencia permanente y digna, y sin el Líbano el maronita se siente desamparado, desorientado y errante.

Pero al mismo tiempo los maronitas son conscientes de que no son ellos los únicos dueños de la tierra de los Cedros, por esto siempre buscan abrir  sus corazones a todos los habitantes que integran el territorio libanés para que puedan construir un Líbano libre, unido y soberano, donde el perseguido encuentra un refugio seguro y donde convivan pacíficamente las diversas comunidades que profesan distintas religiones y siguen diferentes ideologías.

Pablo Meouchi, Pablo Agustin Meouchi, Pedro Pablo Meouchi, Pablo Agustin Meouchi Saade San Charbel, José Meouchi, Grupo Jezinne, Maronitas.De este modo, no todos en Líbano son Maronitas, ni todos los Maronitas son libaneses, pero sí, todos los maronitas deben defender la soberanía del Líbano, si quieren apoyar a su Iglesia madre y sentirse como miembros de una única familia que tiene sus raíces en el Líbano.

Las principales comunidades maronitas están hoy en Siria y Líbano, aunque dado que ha sido una comunidad propensa a la emigración, hay numerosos maronitas también en Australia, Francia, Estados Unidos, Brasil, México y Argentina.

Con información de

https://parroquiaicm.wordpress.com/2009/02/09/¿quienes-son-los-maronitas/

 

LOS MARONITAS…LA IGLESIA DE SAN CHÁRBEL (PRIMERA PARTE)

Los maronitas, es un pueblo descendiente etnica y biológicamente del pueblo Fenicio-Kananí, originalmente fueron cristianos que se congregaron alrededor de a San Marón, personaje que vivió cerca de Antioquía. En aquellos tiempos la iglesia estaba dividida por cuestiones teológicas referidas a la naturaleza de Cristo: unos afirmaban que el hombre Jesús era Dios, otros sólo reconocían su humanidad; unos veían en el dos voluntades, otros sólo una. Marón quiso mantenerse al margen de la polémica y se fue a vivir a la montaña.

Es así que los Maronitas son los cristianos católicos orientales cuyo nombre fue gracias a San Marón, santo hombre, rígido defensor de la fe católica en Oriente, monje modelo cuyo ejemplo siguieron numerosos discípulos, un apóstol que la Providencia de Dios eligió para confirmar a los vacilantes en su fe y para organizar el núcleo principal de la nación maronita que será baluarte de la lucha en favor de la fe y en beneficio del triunfo de la verdad sobre la mentira y de la libertad contra la opresión.

Pablo Meouchi, Pablo AgustinMeouchi, Pedro Pablo Meouchi, Pablo AgustinMeouchiSaade San Charbel, José Meouchi, Grupo Jezinne, Maronitas.Marón vivió cerca de Antioquía, donde tuvo relaciones de amistad con grandes personajes como San Basilio y San Juan Crisóstomo así como otros ilustres Doctores de la Iglesia. De joven, siguiendo las enseñanzas del Divino Maestro, se alejó de su familia, sus bienes y fue a buscar la calma en una montaña, entregándose a la oración la contemplación y el trabajo. Dios le dio el don de los milagros, curando enfermedades del cuerpo y del espíritu y sus prodigios llegaron a proyectarse en lejanos países.

Muchas personas  siguieron su ejemplo, imitando sus virtudes y procurándolo para escuchar sus enseñanzas y adoptar su espiritualidad. Fueron llamados “discípulos de San Marón” y después de su muerte, el “Convento de San Marón” que cobijaba a numerosos monjes que se dedicaron a luchar con heroísmo contra los errores doctrinales de su época. En el año

Al pueblo que en el Patriarcado de Antioquía siguió la orientación religiosa de San Marón y sus discípulos, se les otorgó  el nombre de “Maronitas”. En el siglo VII, por ocasión de la invasión árabe, los maronitas para sobrevivir a la opresión de los conquistadores, tomaron la fuga y se refugiaron en los montes y los valles del Líbano donde formaron la Iglesia Maronita , bajo la batuta  de San Juan Marón, un monje discípulo de San Marón, reconocido por el Papa como Primer Patriarca Maronita de Antioquía y de todo el Oriente. Hasta hoy, los maronitas tienen un Patriarca que lleva junto a su propio nombre, el nombre de Pedro, el Apóstol de Cristo, primer Obispo de Antioquía y más tarde, primer Obispo de Roma, Vicario de Cristo, Papa de la Iglesia Universal. Actualmente el Patriarca maronita se llama NasralaButrosSfeir, y al mismo tiempo es Cardenal de la Iglesia Católica que puede ser elegido Papa.

Pablo Meouchi, Pablo AgustinMeouchi, Pedro Pablo Meouchi, Pablo AgustinMeouchiSaade San Charbel, José Meouchi, Grupo Jezinne, Maronitas.Los maronitas no son ni una secta cristiana, ni una religión misteriosa, ni una Iglesia disidente, son una nación católica, un pueblo con orígenes definidos, una Iglesia muy especial que tiene un destino providencial en el desarrollo de su historia y en la mística de sus santos.

Hasta aquí la primera parte de la historia de los maronitas…Espera la segunda parte.

Con información de

https://parroquiaicm.wordpress.com/2009/02/09/¿quienes-son-los-maronitas/